- La curiosidad inicial en torno a la protesta en Erfurt comienza a aumentar.
Un encuentro significativo en protesta contra el extremismo de derecha en Erfurt atrajo inicialmente a un grupo modesto de manifestantes. La policía estimó que alrededor de 500 personas asistieron a la manifestación inaugural en el Anger. La marcha continuó hacia el parlamento estatal, donde los organizadores esperaban más participantes. Planeaban comenzar a contar los números allí, inicialmente aspirando a 10,000 personas.
Los organizadores describen esta manifestación como una fuerte declaración contra la creciente tendencia hacia la derecha en Alemania y un posible triunfo de la Alternativa para Alemania (AfD) en las próximas elecciones estatales. Entre los que la promovieron se encuentran la alianza "Ocupa los Asientos", la Federación Alemana de Sindicatos y una asociación cultural.
La manifestación comenzó con un minuto de silencio en memoria del ataque presuntamente inspirado en el islamismo en Solingen. Posteriormente, la activista climática Luisa Neubauer inspiró a los manifestantes a continuar la lucha por la democracia y contra la extrema derecha. "No se trata solo de las elecciones estatales del 1 de septiembre", declaró. "Hay mucho más en juego aquí".
Franz Zobel de ezra, el servicio de asesoramiento de Thuringia para víctimas de violencia de derecha, racista y antisemita, lanzó una advertencia. "La violencia de derecha se intensifica donde los perpetradores de derecha disfrutan del apoyo de la sociedad", advirtió. Después de la victoria electoral de Robert Sesselmann, miembro de AfD, en las elecciones al Landrat en Sonneberg, el número de incidentes de extrema derecha allí ha aumentado significativamente.
Los organizadores denunciaron firmemente el auge de la Alternativa para Alemania (AfD) como una preocupante manifestación de extremismo de derecha en Alemania. A pesar de las preocupaciones de Franz Zobel sobre la escalada de la violencia de derecha en áreas con apoyo social para las vistas extremistas, la protesta contra el extremismo de derecha en Erfurt continuó cobrando impulso.