Las asociaciones ven peligrar la financiación del ferrocarril
Enclavamientos de la época imperial, líneas aéreas desaparecidas, rutas sobrecargadas: el Gobierno federal ha anunciado inversiones por un total de casi 40.000 millones de euros para los próximos años con el fin de restaurar la red ferroviaria alemana, que se encuentra deteriorada en muchos lugares.
Una parte considerable de estos fondos iba a proceder del Fondo para el Clima y la Transformación (KTF) del Gobierno federal, un fondo especial económicamente separado del presupuesto básico. Sin embargo, tras una sentencia dictada esta semana por el Tribunal Constitucional Federal, este fondo es significativamente menor, y ha comenzado la búsqueda de fuentes alternativas de financiación.
"El Gobierno federal debe aclarar rápidamente cómo piensa obtener de otras fuentes los miles de millones destinados a la infraestructura ferroviaria", declaró el viernes la organización de defensa del ferrocarril Allianz pro Schiene. Dirk Flege, director ejecutivo de la organización, pidió que se ponga fin a numerosas subvenciones perjudiciales para el medio ambiente, que podrían canalizarse hacia el ferrocarril.
Demanda: revisar los privilegios del coche de empresa y el diésel
"Si se cancelaran los privilegios de los coches de empresa y el gasóleo y se introdujera también un impuesto sobre la parafina, habría miles de millones adicionales para los proyectos que ya no pueden financiarse a través del Fondo para el Clima y la Transformación", dijo.
El Club Alemán del Transporte, partidario de una movilidad respetuosa con la sociedad y el medio ambiente, se expresó en términos similares el viernes. "En la búsqueda de este dinero hay que poner a prueba subvenciones perjudiciales para el medio ambiente como el coche de empresa y el privilegio del diésel, así como los nuevos proyectos de construcción y ampliación de autopistas del Sr. Wissing", dijo Alexander Kaas Elias, portavoz de política ferroviaria de la asociación.
En concreto, son unos 12.500 millones de euros los que deberían salir del KTF para financiación ferroviaria en los próximos años. El fondo cuenta con un total de 200.000 millones de euros. Alrededor de 60.000 millones de euros proceden de préstamos coronavirus no utilizados, que el Gobierno federal reasignó posteriormente para la protección del clima y la modernización de la industria e ingresó en el KTF. Esto es exactamente lo que el Tribunal Constitucional Federal prohibió esta semana. Como resultado, ahora faltan 60.000 millones de euros del fondo.
Acondicionamiento general de vías muy transitadas
También se ven afectados importantes proyectos y planes de la cartera del Ministerio Federal de Transportes (BMDV), según anunció recientemente el ministerio. "Se trata, sobre todo, de fondos para el acondicionamiento del ferrocarril, pero también para infraestructuras de recarga o vehículos industriales respetuosos con el clima". El modo de colmar esta laguna es ahora "objeto de consultas nacionales".
El Gobierno federal prometió a mediados de septiembre casi 40.000 millones de euros para el ferrocarril en los próximos años. Además de los fondos del KTF, se han previsto otras fuentes: 11.500 millones de euros seguirán procediendo del presupuesto federal individual de la BMDV. Esta cantidad se financiará principalmente con el aumento del peaje para camiones. Otros 12.500 millones de euros procederán de un aumento de los fondos propios de Deutsche Bahn, mientras que el propio Grupo deberá aportar 3.000 millones de euros.
El proyecto más importante del Grupo en los próximos años es la remodelación general de los corredores ferroviarios más transitados, que debería mejorar a medio plazo la elevada impuntualidad del transporte de larga distancia. Las obras comenzarán el próximo verano en el llamado Riedbahn entre Frankfurt y Mannheim.
Fuente: www.dpa.com